Encontrar el lugar adecuado para vivir en una ciudad que no conoces o conoces poco no es tarea fácil.En el caso de que elijas compartir piso, es muy importante que tanto tu habitación como las áreas comunes tengan el tamaño y el mobiliario apropiado. Erwin Groenendijk, de My Blue Bricks agencia experta en coliving, recomienda un espacio mínimo en donde te quepa una cama, un armario, una silla y escritorio, “en cuanto a las áreas comunes, estas deben ser diáfanas y con los muebles estrictamente necesarios”.Otro aspecto que tomar en cuenta es el estado del inmueble. Debes comprobar que todo funcione (grifos de agua, puertas, ventanas, electrodomésticos, luces, calefacción o aire acondicionado). Si no tienes la opción de visitar la vivienda o que alguien lo haga por ti, no dejes de preguntar.Además, pide al propietario o arrendatario que sea muy específico sobre si además de la renta tendrás que pagarle alguna otra cantidad (por gastos de portería, utilización de instalaciones comunes del edificio, etc.) y sobre si la renta incluye algún suministro o servicio como agua, luz, gas, internet o limpieza.Una última recomendación es que trates de elegir un casero con una buena capacidad de respuesta ante cualquier incidencia. Es importante que sepas que el propietario tiene que encargarse de todas las reparaciones del piso con dos excepciones: que tu seas responsable de los daños, o que se deba al desgaste y uso ordinario de la vivienda.Todas estas observaciones contribuirán a que tu proceso de adaptación sea lo más fácil posible, que es lo más importante cuando se trata de emprender esta aventura.